Me siento ofendida, o me estoy haciendo vieja

Muchas cosas me han irritado en la vida, no me caracterizo por tener una estructura mental amable, soy más bien, de las que dicen las cosas en la cara en el momento preciso y al que lo necesita, si me lo pregunta también soy amable rayando en lo idiota..

No sé si es que los años me cambiaron, la gente me cambio o simplemente maduré¿ será que me estoy volviendo vieja? le dije hoy al que me pregunto que ¿porqué tan normativa? 

Pero después de mucho pensar y de que por buena gente se aprovechen de mi y mis demonios salieran gritando, pataleando y maldiciendo, pensé que todo lo que me está pasando es producto del Karma, ese mismo que me jode la existencia cuando todo está en hemostasis.

Lo que más me irrita es que sentí como si mi alter ego fuera el que me estuviera gritando, acusándome de "mala jefe" y me dejará como en algún momento yo lo hice con otros tantos "que se lo merecían" con la palabra en la boca.

Pero sabe que le respondo a usted ahora mi buen amigo "cheveron" VAYASE A LA MIERDA!!!
siga en su mediocridad, que porque tan normativa, porque se me da la gana de poner las reglas claras, de ser buena gente si usted hace lo que le corresponde y no me toca estar encima suyo averiguando si quiere o no trabajar... que le da lo mismo, a bueno a mi también me dará lo mismo cuando me pregunten que pienso de usted, cuando por gente como usted mi profesión este llena de mediocres, charlatanes y chamanes por doquier.

que porque tan normativa, porqué en su casa su mamita adorada, la misma que le dijo que renunciara porque no se está muriendo de hambre, no le enseñó que la vida no es color de rosa y que para llegar lejos, a veces, solo a veces hay que trabajar, y GANARSE como yo, el respeto, la confianza y el cariño de los demás.


¡Cómo no va uno a desmayarse en tales condiciones! ¡Y en ese desmayo se funda todo! ¡He ahí el punto de partida de la acusación! ¡Qué el diablo se los lleve! Comprendo que todo eso es muy desagradable; pero si yo estuviera en tú lugar, Rodia me reiría en las barbas de todos; más aún: les lanzaría mi desprecio en plena cara en forma de salivazos. Así terminaría yo con ellos. ¡Ten coraje! ¡Escúpeles!”


Perdón por tomar como diario el blog, pero si es no acá, es en la cara de alguien.


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